Las instrucciones a seguir son:
Evaluación --> ¿No responde y no respira normalmente?
Alerta --> Llama al servicio de emergencias.
Resucitación --> Aplica 30 compresiones torácicas.
Resucitación --> Efectúa dos ventilaciones de rescate.
Resucitación --> Continúa la RCP con 30 compresiones más dos ventilaciones.
Resucitación con desfibrilador --> En cuanto llegue, conecta el DESA y sigue sus instrucciones.
EVALUACIÓN
Hay que evaluar para conocer si la víctima se encuentra en una PCR, tiene que ser rápida:
Comprobar la respuesta de la víctima.
Sacudir a la víctima con suavidad por los hombros y preguntarle alto "¿Te encuentras bien?" y "¿Qué te ha pasado?":
Si responde --> Está consciente y su respiración y circulación están bien. Hay que dejar a la persona como estaba y continuar con la evaluación urgente. Pedir ayuda si es necesario.
Si no responde --> Está inconsciente. Colocarla en decúbito supino y abrirle la vía aérea.
Abrir la vía aérea.
Con la maniobra frente-mentón:
Coloca una mano en su frente y los dedos de la otra mano sujetándole la parte ósea del mentón.
Empuja suavemente la frente hacia atrás, elevando a la vez el mentón.
Valorar la respiración.
Se averigua si la víctima respira con el procedimiento de ver, escuchar y sentir, al que no se debe dedicar más de 10 segundos:
Si respira con normalidad --> Colocarla en posición de reposo, la más adecuada. Si no hay contraindicaciones, posición lateral de seguridad. Solicitar asistencia profesional e ir reevaluando su respiración.
Si no respira o si no lo hace con normalidad --> Llama al 112.
ALERTA
Llamando al 112, se activa la alerta y el operador/a recibe la información, dará las pautas necesarias e instrucciones y movilizará al equipo de emergencias médicas.
Mientras, permanece junto a la víctima. Es recomendable poner el manos libres al llamar, será más fácil seguir sus instrucciones.
Envía a alguien a buscar un desfibrilador, desde el 112 te pueden indicar. Si estás solo/a, no abandones a la víctima e inicia la RCP.
APLICA 30 COMPRESIONES TORÁCICAS
Las compresiones exprimen el corazón de la víctima, entre el esternón y la columna, vaciándolo e impulsando la sangre hacia las arterias. Al dejar la comprensión, el corazón se vuelve a llenar pasivamente.
Para aplicar el procedimiento, la víctima debe estar en decúbito supino sobre una superficie dura. Si está en la cama, trasladarla con cuidado hasta el suelo. Después:
Situarse de modo que se pueda hacer fuerza desde arriba con el peso del cuerpo: de rodillas a su lado si está en el suelo.
Colocar el talón de la mano dominante en el centro del tórax de la víctima y el de la otra mano sobre la primera. Entrecruzar los dedos de ambas manos. Cerciorarse de que no se va a ejercer ninguna presión sobre las costillas o el extremo inferior del esternón.
Con los brazos completamente estirados, flexionar las caderas, dejando caer el peso del tronco sobre el tórax de la víctima, comprimiendo el esternón aproximadamente 5 cm, pero no más de 6 cm.
Relajar la presión un momento, permitiendo la reexpansión completa del tórax, pero sin separar las manos del pecho de la víctima. La fase de relajación debe durar lo mismo que la de contracción.
Repetir los ciclos de comprensión-relajación con una frecuencia de algo menos de dos comprensiones por segundo, entre 100 y 120 compresiones por minuto. Intentar mantener un ritmo estable.
NOTA: No interrumpas las comprensiones más que el tiempo estrictamente necesario, porque la interrupción reduce mucho el flujo de sangre a los órganos, que después costará recuperar.
EFECTÚA DOS VENTILACIONES EFECTIVAS
La técnica más habitual es el boca a boca, que debes aplicar de esta manera:
Realiza de nuevo la maniobra frente-mentón y:
Taparle la nariz con los dedos índice y pulgar de la mano que empuja la frente.
Abrirle la boca con la otra mano, manteniendo la barbilla levantada.
Haz una inspiración profunda de aire limpio, ajusta tu boca contra la suya, asegurando un buen sellado, e insuflar un volumen de aire un poco mayor que el que expulsas en una espiración normal.
Mientras soplas, comprueba que el tórax de la víctima se levanta y se ensancha. Esto significa que se produce una ventilación eficaz.
Aparta tu boca y deja que su tórax se vacíe pasivamente.
Si el tórax no se ensancha, significa que la ventilación no es efectiva. En este caso, continúa la resucitación solo con comprensiones torácicas.
CONTINÚA LA RCP 30.2
Justo después de las dos ventilaciones, retoma las comprensiones torácicas y continúa con el ciclo de:
30 comprensiones + 2 ventilaciones
Sigue reproduciendo este ciclo hasta la llegada del desfibrilador.
Recuerda que la interrupción de las comprensiones para aplicar las dos ventilaciones de rescate no debería superar los 10 segundos.
UTILIZA EL DESFIBRILADOR
El algoritmo de SVB continúa con la utilización del DESA.
Cuando llegue el DESA, lo colocaréis al lado de la víctima y os coordinaréis para preparar el dispositivo para su utilización, sin dejar de realizar compresiones torácicas. Los pasos que tenéis que seguir son:
Dejad el pecho de la víctima descubierto, desabrochándole la ropa y, si es necesario, rasuradle el vello del pecho porque puede inferir en la detección del ritmo cardiaco y en la transmisión de la corriente.
Poned el dispositivo en marcha con el botón de encendido. A partir de este momento, seguid las instrucciones verbales que el dispositivo vaya dando.
Conectad el cable de los electrodos al aparato, siguiendo las indicaciones del DESA.
El DESA os indicará que coloquéis los electrodos en el pecho de la víctima. En la parte posterior de estos hay un dibujo que indica dónde deben ponerse: Uno sobre el músculo pectoral derecho, bajo la clavícula. El otro en la axila izquierda, a la altura aproximada del corazón.
En unos momentos, el aparato indicará “analizando el ritmo cardiaco. No toque a la víctima”. En este momento, deberéis interrumpir las comprensiones y aseguraros de que nadie toque a la víctima. Si el aparato detecta movimientos, lo indicará, porque interfiere en los análisis.
Si la víctima está fibrilación, el aparato dirá “descarga aconsejada” y “pulse el botón intermitente de descarga”. Antes de pulsarlo, pide a las personas que rodean a la víctima que se aparten.
Cuando pulses el botón de descarga, un sonido de intensidad creciente indicará la liberación de energía. Después, dirá "se ha hecho una descarga, ya puede tocar a la víctima".
Reanudad inmediatamente la resucitación, pues conviene que la víctima esté el menor tiempo posible sin flujo sanguíneo. Pocas víctimas recuperan un ritmo útil con una sola descarga; por eso, mientras continuáis la RCP, el DESA vuelve a empezar el proceso de análisis.
Continuad repitiendo el ciclo RCP-análisis-descarga hasta la finalización del procedimiento.
¿CUÁNDO DEBES DEJAR DE PRESTAR LA RCP?
Los ciclos de resucitación continúan hasta que:
La víctima muestre signos de recuperación, en este caso:
- Deja a la víctima en una posición adecuada en reposo con el DESA conectado por si acaso. - Explora los signos vitales y dale el apoyo que necesite.
Lleguen los equipos de emergencias que asuman la responsabilidad.
Llegues a la extenuación.
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